El Mojito cubano es más que un simple cóctel; es una experiencia sensorial que encapsula la esencia del Caribe. Este trago, con su mezcla perfecta de frescura y dulzura, ha conquistado paladares alrededor del mundo, desde las playas de Varadero hasta los bares más exclusivos de La Habana. Cada sorbo es un viaje a la isla, donde el ron cubano se encuentra con la hierbabuena y el cítrico del limón, creando una sinfonía de sabores que evocan noches cálidas y brisas tropicales.
Ingredientes:
Ron blanco cubano: 50 ml
Azúcar: 2 cucharaditas
Limón: 1 unidad
Hierbabuena: 12 hojas frescas
Soda: al gusto
Hielo: en cubos
Proceso de elaboración:
Preparación de la hierbabuena: En un vaso alto, coloca las hojas de hierbabuena y el azúcar. Con un mortero, machaca suavemente las hojas para liberar sus aceites esenciales, pero sin romperlas completamente.
Añadir el limón: Corta la lima en cuartos y exprime el jugo directamente en el vaso. Luego, añade los trozos de lima exprimidos para intensificar el sabor.
Incorporar el ron: Vierte el ron blanco cubano sobre la mezcla de hierbabuena, azúcar y lima. Remueve bien para que los sabores se integren.
Truco: El ron blanco Havana Club le aporte el toque especial.
Agregar hielo y soda: Llena el vaso con hielo en cubos y completa con soda. Remueve nuevamente para mezclar todos los ingredientes.
Decoración: Decora con una ramita de hierbabuena y una rodaja de lima en el borde del vaso. Sirve con una pajita o absorvente para disfrutar de cada sorbo.
El Mojito cubano no es solo una bebida, es una celebración de la vida y la cultura cubana. Cada ingrediente cuenta una historia, desde el ron destilado con maestría hasta la hierbabuena cultivada bajo el sol caribeño. Este cóctel es un tributo a la alegría de vivir, a las noches de música y baile, y a la hospitalidad de un pueblo que sabe cómo disfrutar de los placeres simples de la vida. Así que, la próxima vez que levantes un vaso de Mojito, recuerda que estás sosteniendo un pedazo de Cuba en tus manos. ¡Salud!
